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El carril reversible cuenta con distintas normas de circulación a las del carril convencional. Por eso, hay que ir con cuidado cuando se utilicen. En este blog explicaremos qué es exactamente y cómo funciona cada uno de ellos. ¡No te lo pierdas! Además, puedes aprender sobre automóvil con nuestros cursos en Administración.

¿Qué es el carril reversible?

El carril reversible es una herramienta de la Dirección General de Tráfico (DGT). Tiene como objetivo agilizar y favorecer la circulación del tráfico, así como minimizar los atascos en un sentido de la circulación determinado.

Este carril se establece en una vía en el sentido contrario al habitual y de manera provisional. Normalmente se habilita en autovías y autopistas, aunque también en algunos entornos urbanos, especialmente en periodos vacacionales. No obstante, dependiendo de la época del año, la densidad de la circulación en las carreteras o grandes vías urbanas puede variar mucho. También se utilizan los carriles de alta ocupación (BUS VAO), cuya dirección de circulación se adecua a las necesidades del tráfico, con el fin de impedir que se generen masificaciones.

¿Cómo funciona el carril reversible?

Unos cientos de metros antes de llegar al carril reversible se muestran señales que indican la cercanía del carril especial. La incorporación a esta zona es a través de un acceso especialmente habilitado por los agentes de tráfico. Dicho carril está delimitado por una hilera de conos naranjas reflectantes para que se vean con facilidad durante la noche. No hay una barrera que separe de los vehículos que vienen en sentido contrario. Por eso, existen unas normas especiales para circular que hay que seguir con las máximas garantías. Estas normas son las siguientes:

Únicamente para motos y coches

En este carril solo se permite el acceso a motocicletas y turismos. Por lo tanto, queda prohibido el paso de camiones, furgonetas o incluso turismos con remolque.

Luces encendidas

Las luces de cruce o corto alcance deben estar siempre encendidas, independientemente del momento de día. Esta norma afecta a los coches y motos, tanto del carril reversible como del adyacente.

Límite de velocidad

La velocidad obligatoria de este carril debe estar comprendida entre los 60 y 80 km/h, en todo momento.

Distancia de seguridad

Está totalmente prohibido salirse del carril delimitado por conos y, mucho menos, realizar una maniobra de adelantamiento. También es imprescindible respetar la distancia de seguridad. Pues, un frenazo o un golpe puede generar un atasco difícil de solucionar en esas circunstancias.

Carriles reversibles en ciudad

También existen carriles reversibles en ciudad que permiten modificar el sentido de la dirección en función de la hora y época del año. En este caso las líneas son dobles y discontinuas y están ubicadas a cada lado del carril. También se utilizan semáforos instalados en pórticos para indicar si el carril está habilitado para circular o no. No obstante, estas normas de tráfico estarán sujetas a la zona y entorno urbano en la que se han implementado.